27 abril 2024

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    Últimos días de negociaciones entre los partidos para decidir quién será el alcalde o alcaldesa de Capdepera

    Queda exactamente una semana para que se decida quién será la persona que dirigirá el municipio la próxima legislatura. 

    Así como en otras zonas de Mallorca ya hemos visto que se han cerrado pactos de gobernabilidad, en Capdepera no es así; de hecho se antoja todavía difícil que pueda haberlo (no será hasta el último momento). 

    Lo que sí ha habido, han sido reuniones y tomas de contacto. PP, PSIB y Més per Capdepera ya se han visto las caras. En algunos casos hasta en dos ocasiones (como el caso de PP y Més).

    Una de las cosas que nos ha llamado la atención es que PSIB y Més per Capdepera también se han reunido estos días, cuando parecía que no se iban a ver las caras durante las negociaciones.

    Estos días, los socialistas están en una posición hermética, informativamente hablando. A la hora de valorar la situación de posibles pactos no abren la boca, aunque sí indican que se van a la oposición, con Rafel Fernández como líder. 

    Aún así, sabemos que sobre la mesa hay un posible pacto entre ambas formaciones (PSIB y Més) para repartirse la alcaldía dos años cada uno, algo que deberá valorarse por los afiliados de cada formación. 

    Tanto en el PSIB como en Més hay quien considera que no hay nada que pelar y nada que hacer con el otro; mientras que por otro lado, en ambos partidos, hay personas de la opinión de que si hay que gobernar mejor hacerlo con un socio ‘más natural’ que con el PP (esto sería en el caso de Més). 

    El PP, ¿qué hay de ellos? Mireia Ferrer y tres personas de su confianza (el presidente de la junta local, Miquel Riera, Catibel Llabata y Marga Servera) se han reunido ya en dos ocasiones con Núria Garcia y los suyos. De momento, dicen que no han acordado nada, si bien ya hay sobre la mesa posibles acuerdos y apoyos.

    Lo que está claro es que posiblemente si por los dirigentes de los partidos fuera, tanto de unos como de otros (hablamos de los tres: PP, PSIB y Més), ya se podría haber cerrado algún acuerdo por un lado o por otro. 

    Pero aquí juega un papel determinante los posibles pactos antinatura y las exigencias que pueda tener cada uno (sobre todo alguno en concreto).

    Por consiguiente: serán días de nervios. Todos saben que pueden conseguir la alcaldía. 

    Tanto Ferrer, como Fernández y Garcia son conscientes de que matemáticamente pueden resultar elegidos (en primera o segunda votación), pero las negociaciones y el visto visto de sus respectivos afiliados será lo que determinará hacia dónde va el apoyo de uno u otro. 

    Estos días han sido movidos: lunes reunión PP y PSIB; y martes reunión entre PSIB y Més per Capdepera.  Sobre la mesa de todos ellos hay varias opciones, a cuál mejor y a cuál peor, según el punto de vista desde el que se mire.

    Lo bueno es que todos saben lo que han hablado todos.  Es como un posible intercambio de cromos entre unos y otros (algo muy normal en política y más a la hora de intentar formar pactos).

    Por lo que nos cuentan: el ambiente entre PP y Més es más agradable y apacible que el existente entre el PSIB y los econonacionalistas de Més. 

    La historia de relación entre socialistas y nacionalisitas está sobre la mesa y se está convirtiendo en un escollo, al menos hasta día de hoy, para poder acercar posturas; si bien esto va de gobernar de no hacer amigos, con lo que al final nos podríamos llevar hasta una sorpresa. 

    En resumen, se antojan unos días intensos y movidos en la esfera política municipal de Capdepera. Los ayuntamientos, y entre ellos el nuestro, tienen como límite el sábado 17 de junio, para constituirse. 

    Y a día de hoy, al menos al cierre de esta edición, no había forma de cerrar un pacto de gobernabilidad que asegure cómo quedará el consistorio en los próximos años, con lo que nos podemos esperar cualquier cosa. 

    No seremos nosotros los que nos aventuremos a decir nada. De momento explicamos cómo está todo, la semana que viene nos vamos de vacaciones (y no habrá Faxdepera). 

    Ya será tras la investidura en la que volveremos a retomar la actualidad de nuestro municipio, con las vistas puestas en el futuro. 

    El PP se reúne con el PSIB y por segunda vez con Més per Capdepera

    El Partido Popular de Capdepera se ha reunido esta semana con los socialistas (el lunes por la mañana) y nuevamente con los ecosoberanistas de Més, porque ya lo hizo la semana anterior por primera ocasión.

    Al parecer, en el encuentro con Rafael Fernández y los suyos, al PP le dejaron claro que podría gobernar en minoría y que el Partido Socialista ejercería una oposición responsable y ejemplarizante. 

    Por su parte, Mireia Ferrer y sus principales colaboradores se han vuelto a ver las caras esta semana por segunda vez con Nuria Garcia y los principales mandatarios de Més per Capdepera. 

    Según hemos podido saber ya se ha empezado a hablar de posibles colaboraciones entre ambas formaciones y de ofrecimientos por parte de la fuerza más votada (o sea el PP) a los ecos soberanistas y de las regidurías y áreas que éstos últimos podrían tener si pactaran con los populares.

    ¿Qué opciones tiene Mireia Ferrer a día de hoy? Las mismas que hemos comentado hasta ahora: Al ser la fuerza más votada, llegar a la segunda ronda de votaciones el día 17 y ser alcaldesa en minoría, cerrar algún pacto con Més per Capdepera para repartirse el gobierno, o que finalmente se quede en la oposición.

    Ahora, es el momento de valorar junto a los afiliados de los diferentes partidos las propuestas que han recibido cada uno de éstos por parte de sus ‘adversarios’, incluyendo en algún caso un pacto ‘antinatura’ entre formaciones con ideales políticos opuestos (que también es posible).

    Reunión PSIB y Més per Capdpepera 

    Esta semana PSIB y Més Capdepera se han reunido para valorar la posibilidad de llegar a un posible acuerdo de cara a la gobernabilidad del municipio para los próximos cuatro años.

    Fue el pasado martes cuando Rafael Fernández, Nuria García y sus principales colaboradores se reunieron para valorar la posibilidad de realizar un pacto que les permita dirigir el futuro del municipio en común.

    Sobre la mesa estuvo la posibilidad de repartirse la alcaldía dos años cada uno sin establecer quién gobernaría primero y quién lo haría después. En este supuesto, sí o sí Rafel Fernández sería el líder de los socialistas durante los cuatro próximos años. 

    Al margen de posibilidades y de acuerdos a los que se puedan llegar, el ambiente de la negociación entre ambas formaciones era tan tenso que se podía cortar con un cuchillo. 

    Aún así, ésto no significa que no exista la posibilidad de que socialistas y ecosoberanistas puedan llegar a un acuerdo de gobernabilidad para el municipio.

    Al cierre de esta edición, ambas formaciones debían exponer el posible pacto ante los miembros de su agrupación y asamblea, respectivamente, sobre todo Més per Capdepera.

    A día de hoy, el partido de Nuria Garcia tiene varias opciones sobre la mesa: una es pactar con el PSIB, otra es hacerlo con el Partido Popular y una tercera sería quedarse en la oposición.

    Mientras, lo único que tiene claro a día de hoy Rafel Fernández es que sí o sí será el líder de la oposición los próximos cuatro años; y a partir de aquí, se abre un abanico de posibilidades que dependen de posibles acuerdos que pueda alcanzar, principalmente con Més per Capdepera (si es que la hay alguna posibilidad).

    Filias y fobias

    Posiblemente, haya mucha gente que no lo sepa, pero en política las filias y fobias personales pueden ser un punto determinante a la hora de permitir que un posible pacto entre diversas formaciones políticas pueda llegar o no a concretarse.

    Este caso lo vemos en nuestro municipio entre PSIB y Més per Capdepera, donde por tradición ambas formaciones han tenido siempre una relación áspera y tensa.

    A día de hoy, éste es posiblemente el primer escollo que impide a socialistas y ecosoberanistas de Capdepera llegar a un acuerdo para dirigir los designios de nuestro municipio durante los próximos cuatro años; una situación que la candidata del Partido Popular, Mireia Ferrer, conoce a la perfección y utiliza como comodín a la hora de llevar a cabo sus negociaciones.

    Ya dicen que a mar revuelto ganancia de pescadores, y este es un juego al que intentan sacarle provecho en el Partido Popular, pero, porque no decirlo, también en Més per Capdepera, ya que les permite abrir la puerta a una posible negociación con los populares, aunque sus líneas ideológicas sean totalmente opuestas. 

    Por cierto, que al hablar de filias y fobias no debemos olvidar las que el Partido Popular tienen con el candidato de El Pi, Tomeu Moll, que fue el cabeza de lista del PP de Capdepera en los pasados comicios municipales y que abandonó la formación quedándose el acta de regidor. 

    Hay muchos en el PP que a día de hoy todavía lo siguen considerando un tránsfuga y que sería totalmente imposible pactar con él. En cambio otros van per feina y consideran que todo lo que sea sumar es bueno,porque ya se sabe que en política hay ocasiones en las que los aspectos personales quedan relegados a un segundo término y la importancia del resultado de una negociación está muy por encima de lo que puedan sentir o pensar determinadas personas en concreto. El partido es el partido, dicen.

    El Pi y Tomeu Moll

    Con quien no se ha reunido todavía nadie, al menos que nosotros sepamos, es con el líder de El Pi, Tomeu Moll, quien pese haber conseguido unos muy buenos resultados en comparación con las elecciones anteriores (pasando de uno a dos regidores), no es a día de hoy una variante determinante a la hora de determinar quién será o no el próximo alcalde o alcaldesa de Capdepera.

    Con ello, no es que le queramos restar importancia a Moll, ni mucho menos, ya que una vez se haya conocido el acuerdo de gobernabilidad para nuestro municipio, no es lo mismo gobernar con cinco, que hacerlo con siete o incluso con doce. Es por ello, que llegado el momento, Moll y los suyos tendrán algo que decir acerca de si quieren o no entrar en el equipo de gobierno, algo que creemos que dependerá de ellos mismos, si bien su puesta en juego no se producirá hasta los últimos momentos de las negociaciones entre los tres ‘grandes’.

    Por cierto, si nos quedamos con los ejemplos de las últimas semanas en otros municipios de Mallorca, como por ejemplo Ses Salines o Muro, el Pi y el PP no han tenido ningún tipo de problema para llegar a un acuerdo de gobernabilidad. Pero ya sabemos que Capdepera is different. 

    Aún así, a pesar de que pueda haber algún cabreo por el camino, no creemos que en caso de que sea necesario, ambas formaciones llegaran a un acuerdo. 

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